"Señor presidente:
El futuro del derecho del trabajo y otros temas de debate en esta conferencia tienen singular importancia frente a las relaciones laborales que vienen y que plantean un escenario inequitativo y hostil para los trabajadores.
Desde hace tiempo los trabajadores venimos observando transformaciones negativas para nuestros intereses y derechos que representan una progresiva pérdida de legítimas aspiraciones al desarrollo laboral, económico y social.
La recreación de la OIT para lograr la justicia social, deberá tener en cuenta las diferentes realidades.
No es igual la situación de Asia, África, Europa y América, son procesos históricos, culturales, económicos y sociales distintos.
Por lo tanto esta OIT, moderna e inteligente, debe pretender universalizar la justicia social, sin dudas.
En Latinoamérica, promovemos una relación entre el capital y el trabajo, que no estamos dispuestos a abandonar, sino por el contrario, queremos reafirmarla.
Así decimos, que la justicia social para nosotros se realiza con la plena vigencia de los derechos y particularmente con el empleo estable y protegido.
Todos los procesos de modernización y transformación que se propongan desde la OIT, deben tener presente que los trabajadores de las Américas no estamos dispuestos a resignar derechos.
Rechazamos la violencia y la práctica antisindical en la región.
No estamos dispuestos a aceptar que en un mundo donde las desigualdades se profundizan y aumenta la concentración de la riqueza, la única respuesta sea la precarización de las condiciones de trabajo.
Señor director, usted ha expresado en su memoria, la aparición de nuevas formas de organización del trabajo que pueden ir acompañadas de informalidad.
Frente a esta problemática, nos preguntamos ¿qué modelo de contrato social queremos construir a partir de estas realidades?
Se advierte cierta tendencia en propiciar un modelo de contrato social con una coexistencia pacífica entre las relaciones laborales formales y la informalidad
Los trabajadores no somos complacientes con la informalidad.
No habrá paz social si se propicia la informalidad laboral y la vulnerabilidad de los derechos.
El objetivo debe ser siempre la inclusión con derechos, con las conquistas sociales plenamente vigentes.
Nuestro contrato social, debe estar integrado con la estabilidad en el empleo; con la seguridad social contributiva; con la remuneración justa; con empleos verdes bajo el concepto de transición justa, con la reivindicación del tripartismo y el rol de la OIT.
Más aun en este tiempo donde tenemos planteos y cuestionamientos por parte de los empleadores que ponen en tela de juicio el derecho de huelga y el convenio 87, situación aun no resuelta.
En argentina, desde el año 2003 a la fecha, se asumió la decisión política de enfrentar una profunda crisis económica y social repartiendo las cargas y fortaleciendo el sistema de garantías y derechos de los trabajadores.
Se activo la negociación colectiva, se generaron puestos de trabajo, se garantizó la plena vigencia del derecho a huelga y el trabajo se mantuvo en el centro de las políticas públicas, con un gobierno que asumió el rol de articulador entre los intereses del capital y el trabajo.
Tenemos asignaturas pendientes: erradicar la informalidad laboral, continuar la lucha contra el desempleo, terminar con la pobreza y marginalidad; desgravar los impuestos al trabajo y fortalecer el sistema solidario de salud.
Señor director, los trabajadores de mi país acompañaremos todos los esfuerzos para mejorar y garantizar la vigencia de los derechos de los trabajadores en todo el mundo.
Acompañaremos también a las trabajadoras y trabajadores del sector informal y lucharemos con ellos por la restitución y vigencia de sus derechos.
El trabajo es el ordenador social y económico por excelencia y, como tal, debe otorgar niveles adecuados de protección social para la realización de las personas, de las sociedades y de los países.
Para los trabajadores, el cumplimiento de nuestros derechos es un objetivo político; no solo normativo.
Los trabajadores contamos con la decisión, la voluntad, la organización y la fuerza para defender los derechos laborarles y mejorar la calidad de vida de los pueblos.
Reafirmamos el valor del trabajo para lograr un desarrollo sustentable con justa distribución de la riqueza.
No hay un mundo con equidad y justicia social sin garantizar el trabajo digno con derechos.
Muchas gracias"